Los alzamientos y rebeliones suelen tener liderazgos que no siempre se encuentran unificados. En muchas ocasiones estos líderes pueden hasta llegar a ser antagónicos. Según los autos judiciales abiertos después de aplastada la rebelión de Cisteil existe información de que pudo haber un liderazgo paralelo en los eventos de 1761.

En la declaración que rindió el 30 de noviembre de 1761 Francisco Puc de Tiholop dijo que el rey coronado en Cisteil fue Francisco Uex, cacique del pueblo de Tahdziu. Durante los días más álgidos del levantamiento Uex habría hecho una serie de nombramientos entre los que destacaban el de su sucesor directo que recayó en su hijo Santiago y el de sacerdote que fue conferido a Joseph Chablé oriundo de Tizimín.

Una de las declaraciones más enigmáticas de Puc es la que se refiere a la presencia en Cisteil de “hechiceros” vestidos a la usanza de los mayas precoloniales y cuyas prácticas habían sobrevivido en la región conocida como La Montaña: con las orejas “cortadas” (es decir, horadadas) y usando una especie de taparrabos ¿Eran mayas de la “montaña” rebelde?

Uex y parte de sus seguidores oriundos de Tahdziú murieron el 26 de noviembre durante el ataque de las milicias coloniales mandadas por Cristóbal Calderón.

Con información de “Rey Canek. Documentos sobre la sublevación maya de 1761”. Editado por Gabriela Solís Robleda y Pedro Bracamonte y Sosa.

Iglesia de Tahdziú (cortesía de Juan Caamal Pech).