Cisteil, epicentro de la rebelión de Jacinto Canek
El que fue el epicentro de la sublevación de Jacinto Canek, Cisteil, fue fundado a mediados del siglo XVIII por milperos mayas y sus familias que se encontraban en busca de montes para realizar sus cultivos. Para 1755 Cisteil ya tenía un cabildo propio conformado por alcalde, regidores, tupiles y un escribano. Además en documentos eclesiásticos ya figuraba como una parcialidad de la república de indios de Tixcacaltuyub. Al momento en que estalló la rebelión de Canek en Cisteil los mayas ya contaban con una estructura de gobierno autónoma y habían comenzado a construir la iglesia y un cementerio, reproduciendo el orden espacial de los otros pueblos de indios coloniales de Yucatán. Fue la iglesia de Cisteil el auténtico corazón de la rebelión anticolonial más importante de la historia de los mayas peninsulares. Una vez que inició el alzamiento en noviembre de 1761 Jacinto Canek fue “coronado” rey en ese edificio.
Es difícil saber cuándo y cómo se despobló Cisteil. En el Mapa corográfico de la provincia de Yucatán de 1814 el pueblo aún figura entre aquellos que fueron representados por el cartógrafo anónimo sin ningún tipo de leyenda que indique que la localidad hubiera sido despoblada o destruida.
Aunque frecuentemente se señala que Cisteil fue arrasado tras la implacable represión del gobierno colonial el estudio más reciente y más completo de la rebelión no refiere nada al respecto. Lo cierto es que con el tiempo Cisteil fue abandonado y la mayoría de sus edificios antiguos son ahora ruinas. Hace unas décadas la zona que antes fue Cisteil volvió a ser ocupada por milperos provenientes de un pueblo cercano. Para los movimientos sociales de los mayas contemporáneos, Cisteil, como epicentro de la rebelión de Canek, sigue teniendo gran importancia. En 2005 de allí salió el contingente de la campaña “No en nuestro nombre” que cuestionaba que se legislara en materia indígena sin que se reconozcan los Acuerdos de San Andrés, firmados estos entre el gobierno federal y la delegación zapatistas en 1996. En 2014, Cisteil también fue sede de la reunión regional del Congreso Nacional Indígena, después de que esta organización fuera relanzada en 2013 desde San Cristóbal de las Casas con la cátedra Tata Juan Chávez.